Hay seguros y seguros, como también hay personas responsables e irresponsables en el momento de conducir un vehículo. En el convulsionado tránsito de la actualidad debemos esmerarnos en conducir con cautela y responsabilidad. No hay compañía aseguradora que reemplace al buen criterio que tenemos que tener al momento de sentarnos detrás del volante y conducir. Hay seguros y seguros, pero de nada sirven si conducimos no respetando las leyes de tránsito, sobrecargamos el vehículo o no lo tenemos en las condiciones óptimas de circulación y seguridad. El manejo responsable, el respeto por la vida y la previsión son elementos que tienen que estar intrínsecos en cada individuo para no tener que lamentar hechos que pueden ser fruto de nuestro irresponsabilidad y falta de criterio. Revisemos el vehículo de forma integral antes de utilizarlo, no usemos combustibles inapropiados, no llevemos mas carga o pasajeros de los recomendados, no manejemos en estado de ebriedad ni bajo la influencia de estupefacientes o medicamentos que disminuyan nuestros reflejos al momento de conducir, respetemos las distancias de frenado, estas son algunas de las formas de estar seguros, seguros.
